(Infobae) | Existen cables submarinos para llevar electricidad a diferentes lugares del mundo (también internet). A través de un acuerdo, un grupo de países planea construir el más grande del mundo. Recorrerá cuatro tramos de los mares Mediterráneo y Egeo, y conectará Grecia, Chipre e Israel.
Será sumergido en las profundidades del mar Mediterráneo y funcionará como backup o servicio de respaldo en caso de emergencias (apagones u otro tipo de problemáticas que puedan surgir en Grecia, Chipre o Israel). El cable será el más largo y profundo dentro de su tipo, hasta el momento.
El lunes pasado, la empresa pública DEI Quantum EnergySA, filial de la compañía de electricidad pública griega DEI, con sede en Chipre, comenzó los trámites para la construcción de este cable eléctrico submarino. Será de 2.000 megawatt y unirá las redes eléctricas de los tres países, bajo un proyecto denominado “Interconector EurAsia”.
Tendrá 1.500 kilómetros de largo a 2.700 metros de profundidad del mar. Por el cable circulará electricidad a una capacidad de 1.000-2.000 megavatios. Este proyecto es cofinanciado por la Unión Europea y tendrá un costo de aproximadamente 750 millones de euros.
Estaría terminado en 2024 y comenzaría a funcionar para los tres países en 2025. El objetivo del proyecto es que el cable eléctrico conecte un tramo entre Israel y Chipre, cubriendo cerca de 310 kilómetros, así también como otros 900 kilómetros conectarán Chipre con la isla griega Creta, y otro de 310 kilómetros conectarán Creta con el resto de Grecia.
Qué significa este plan de interconexión
Así, los gobiernos de Grecia, Chipre e Israel quieren impulsar el uso de energías renovables en sus respectivos países. Permitirá brindar un intercambio de electricidad entre Europa y Asia de forma más cómoda. Tal como señalaron durante la firma del acuerdo desde los gobiernos de cada país, permitirá “promover la cooperación para examinar la posibilidad de planificación, así como el potencial desarrollo e implementación del proyecto”.
Asimismo, permitirá a Chipre finalmente estar interconectado energéticamente con el resto de la Unión Europea. Es el único país miembro de la Unión Europea que hoy se encuentra completamente aislado. La Unión Europea designó a este proyecto como de interés común y por lo tanto está dispuesta a ayudar en la financiación. Además, los tres países pretenden así explorar y explotar los recursos de gas natural.
Existen otras conexiones entre países a través de cables submarinos, como por ejemplo la de Scottish Power, en Reino Unido, que está desarrollando un gran cable submarino eléctrico, denominado Eastern Link, que conectará Escocia e Inglaterra a través del Mar del Norte y que tendrá una capacidad de 4 gigavatios (GW).
El proyecto consta de dos grandes líneas de 2 GW cada una, que permitirán transportar energía renovable para llevarla desde Escocia a unos 4 millones de hogares ingleses, ha informado este lunes Iberdrola. El Eastern Link estará compuesto por algunos de los cables HVDC submarinos más largos del mundo, con una capacidad combinada de hasta 4 GW, y aunque la inversión no se ha cuantificado, las tres empresas que lo desarrollarán estiman que ascenderá a miles de millones de libras esterlinas.
Los cables de esta infraestructura, que suministrarán energía limpia a cuatro millones de hogares del Reino Unido, discurrirán a través de 440 kilómetros desde el este de Escocia, que es ya un importante centro de generación de eólica marina, a dos puntos del noreste de Inglaterra, Selby y Hawthorn Point.