Nueve años después, Google decide cerrar Project Loon. El departamento de innovación de Alphabet presentaba en 2013 su proyecto de globos aeróstaticos para hacer llegar internet a lugares recónditos. Ahora, a través de un comunicado, Astro Teller, director de Loon, ha anunciado que es momento de pasar página.
El anuncio llega poco después de haber alcanzado algunos logros significativos. Tras batir el récord del vuelo más largo en globo en la estratosfera, en diciembre de 2020 anunciaban que su sistema de navegación se basaba íntegramente en la inteligencia artificial.
Un ambicioso proyecto sin un modelo sostenible
Durante estos años, Loon ha ayudado a restaurar servicios de telecomunicaciones como los destruidos por un huracán en Puerto Rico. En Kenia, los globos de Loon comenzaron a funcionar a nivel comercial a mitad del año pasado, dando acceso a Internet en un área de 50.000 kilómetros cuadrados.
“Hablamos mucho sobre conectar a los próximos mil millones de usuarios, pero la realidad es que Loon ha estado persiguiendo el problema más difícil de todos en conectividad: los últimos mil millones de usuarios”, explica Alastair Westgarth, director ejecutivo de Loon.
“Las comunidades en áreas demasiado difíciles o remotas de alcanzar, o las áreas donde brindar servicios con las tecnologías existentes es demasiado costoso para la gente común. Si bien hemos encontrado varios socios dispuestos a lo largo del camino, no hemos encontrado la manera de reducir los costos lo suficiente para construir un negocio sostenible a largo plazo”, reconoce el ejecutivo. Uno de esos socios fue Telefónica, quien ayudó a llevar los globos de Loon a zonas recónditas del Amazonas.