En este sentido, expertos y expertas también refieren que es importante que las empresas puedan hacer evaluaciones exhaustivas en temas legales. El uso de IA en modelos de negocios no siempre tienen en cuenta cuestiones de actualización de algoritmos, por más que pueda parecer una obviedad. Corregir desvío y sesgos en procesos dicta una mejora sustancial entre la relación empresa y consumidor.

“Independientemente de lo legal, las empresas no solo deben garantizar que los modelos de Inteligencia Artificial recopilen y almacenen los datos personales en condiciones estrictas, sino que además los protejan del uso indebido y la explotación, así como respeten los derechos y privacidad de las personas”, subraya el jefe de datos e innovación de Nubiral, Sergio Mastrogiovanni.
Incluso, Mastrogiovanni abunda que redes sociales, bancos y los propios gobiernos recopilan información u analizan datos personales como nombre, dirección, número de tarjeta de crédito o fotografías. Por ello, se remarca la importancia de una ética en el uso de la Inteligencia Artificial. Pues, si bien los retos son grandes, la responsabilidad es aún mayor para las compañías e instituciones, sobre todo, en el tema de la privacidad.