(Intra News) / De manera reciente se ha informado un logro asombroso: conectar con tres procesadores cuánticos separados. Esto ha arrojado que se cuente, por primera vez, con internet cuántico de múltiples nodos del mundo. Con esta tecnología se cambiaría la forma en que se concibe la web. Dicho intento ya se había llevado a cabo por científicos y científicas de varios lugares sin éxito desde hace varios años.
De esta manera, QuTech, un instituto de investigación cuántica con sede en Delft, Países Bajos, fue el encargado de realizar esta hazaña. Y dicha tecnología se convierte en un parteaguas en materia de ciencia. Las computadoras tradicionales cuentan con algunas limitaciones al momento de hacer algunas predicciones y experimentos. Aún cuando se le colocan varios complementos aparecen algunas restricciones. Pero las computadoras cuánticas tienen como premisa trabajar con “qubit” (bits cuánticos).
Los bits cuánticos son superconductores y brindan la posibilidad de hacer cálculos en paralelo, de manera no secuencial y simultánea. Así, estas computadoras podrían resolver ecuaciones que serían imposibles para la informática tradicional e, incluso, la mente humana. Y aunado a todo lo anterior, estas acciones las haría a una velocidad realmente increíble, dando paso a otra forma de concebir la web.
Formas en que se podría emplear el internet cuántico
En primer lugar, estos podrían brindar la posibilidad de revolucionar el sector industrial, desde la química hasta la informática, transporte o energía. Por supuesto que su uso principal podría ser la ciencia y la física, por lo que su rubro más importante sería la tecnología y los sistemas de comunicación. Esto abriría un nuevo paradigma en cuanto al tipo de navegación que se podría llegar a efectuar.
Conexiones ultraseguras que eliminarían los delitos cibernéticos, un asombroso rendimiento y una velocidad increíble en el transporte de datos. Todo esto se puede tener gracias a los “qubits” y se estima su llegada en cinco años. Incluso, ya se ha comenzado a manejar el término “teletransportación cuántica”, pues los datos viajarían de un punto de manera casi inmediata y sin alteraciones. Sin duda que la realidad, de nueva cuenta, supera a la ficción.