La Cachemira india recuperó el servicio de internet de alta velocidad 4G después de 18 meses de suspensión, una medida que buscaba entorpecer las movilizaciones a través de las redes sociales contra la retirada en agosto 2019 del estatus especial de esta región, la única de mayoría musulmana del país.
«Tras una revisión cuidadosa del escenario general de seguridad, por la presente revoco las restricciones sobre los servicios de datos móviles y la conectividad a Internet de línea fija», anunció anoche en una orden el secretario principal de la región, Shaleen Kabra.
Sin embargo, apuntó, en el caso de los usuarios de tarjetas móviles de prepago, éstos deberán registrase y verificar sus datos con las autoridades indias para recibir acceso a Internet.
La reactivación del 4G llega después de que el pasado marzo la región recupera el acceso total a Internet hasta una velocidad máxima de 2G, una medida que había sido precedida un mes antes por un restablecimiento limitado a 301 páginas web y sin redes sociales.
Los estudiantes y la comunidad empresarial han recibido con alivio la revocación de las restricciones, una situación que «ayudará» en el trabajo e «impulsará» los negocios.
Activistas de derechos humanos, sin embargo, ven la medida como insuficiente, ya que «las voces disidentes han sido silenciadas y las redes sociales están siendo monitoreadas bajo el disfraz de la ‘seguridad nacional’», afirmó a Efe el activista Khurram Parvez, que lo considera un ataque a la libertad de expresión.
«No solo las redes sociales, sino incluso los grandes medios locales están amordazados por la nueva política de medios anunciada recientemente», aseguró por su parte a Efe el académico y comentarista Raashid Maqbool.
18 MESES DE RESTRICCIONES
Internet fue bloqueado el 5 de agosto de 2019 horas antes de que el Gobierno indio suspendiera el estatus especial que el Estado de Jammu y Cachemira mantenía desde hace más de siete décadas y dividió la región en dos Territorios de la Unión controlados por Nueva Delhi.
La suspensión fue acompañada de cortes de las telecomunicaciones y restricciones a los derechos de reunión sin precedentes que duraron meses antes de ser progresivamente suavizados, así como una presencia reforzada de las fuerzas de seguridad en la que ya era una de las regiones más militarizadas del mundo.
Las fuerzas de seguridad también detuvieron a un número indeterminado de políticos, activistas y ciudadanos, que varias fuentes oficiales elevaron a miles de personas, y de las cuales todavía docenas se encuentran bajo «custodia preventiva».
Entre esos políticos detenidos se encontraba el antiguo jefe del Gobierno cachemir Omar Abdullah, liberado el pasado 24 de marzo, que celebró hoy en Twitter que «por primera vez desde agosto de 2019, toda Cachemira tendrá datos móviles 4G. Mejor tarde que nunca».
Esta región es escenario desde los años 90 de un movimiento insurgente de tintes separatistas, y Pakistán y la India se la disputan desde su independencia del Imperio británico en 1947.
/ Vía: EFE-