(EFE) | La firma china Oppo, que ya es el quinto fabricante de móviles más vendido en España, aspira a convertirse en la marca de tecnología premium y joven preferida por los consumidores europeos, para situar así sus dispositivos móviles entre los más populares en el continente en los próximos años.
En una charla con periodistas, la presidenta de Oppo para Europa occidental, Maggie Xue, ha explicado que, tras implantarse en cinco países del viejo continente durante el pasado 2020, su meta es continuar creciendo.
«Nos hemos fijado un objetivo ambicioso para los próximos años: convertirnos en uno de los principales fabricantes de Europa y estamos convencidos de que lo conseguiremos», ha afirmado.
Para ello, Oppo no solo se va a centrar en sus teléfonos inteligentes, sino que también potenciará el resto de dispositivos con los que cuenta su cartera, como cascos inalámbricos o relojes inteligentes.
Además, la compañía quiere impulsar las ventas de sus teléfonos móviles de gama alta (premium), en lugar de la gama media como venía haciendo hasta ahora en Europa.
En definitiva, asegura Xue, pretende que los usuarios europeos «vivan la experiencia de Oppo», no solo utilicen sus dispositivos. «Estamos centrados en cómo hacer que los usuarios no puedan vivir sin Oppo. Nos preocupamos por sus gustos y sus comentarios», ha explicado.
CENTRADOS EN LAS RELACIONES LOCALES
Para alcanzar su objetivo, Oppo -cuya principal sede europea está en la ciudad alemana de Düsseldorf- está estableciendo alianzas con operadores de red punteros en Europa, para así conocer de primera mano cómo es el mercado.
«Tenemos un equipo aquí con el que nos aseguramos que podemos conocer profundamente las demandas locales de los consumidores y también la comercialización de cada producto», ha afirmado Xue.
En su opinión, para convertirse en una de las primeras marcas tecnológicas de Europa, necesitan entender a la perfección qué es lo que los consumidores locales.
Por ello, la compañía prevé que en sus centros de Europa occidental no solo se produzcan sus dispositivos, sino que también se desarrollen. En sus planes figura invertir unos 6.000 millones de euros en los próximos tres años para avanzar en la conectividad del futuro.
UN GRAN CRECIMIENTO EN EUROPA
Oppo experimentó un gran crecimiento durante 2020 a pesar de la pandemia del coronavirus. Según sus cifras, las ventas de teléfonos móviles crecieron alrededor de un 200 % en Europa occidental, a pesar de que el mercado se contrajo un 10 %.
Según datos de distribución estimados por la consultora Canalys, Oppo cerró 2020 con una cuota de mercado del 7 % en España, tras prácticamente triplicar su presencia en un año (197 %).
Le preceden Xiaomi, que lidera el mercado con una cuota del 27 %; Samsung, con el 26 %; Apple, con un 18 %; y Huawei, con un 10 %.
CONFIADOS EN EL FUTURO
Maggie Xue cree que la irrupción de la pandemia ha hecho que los consumidores modifiquen su comportamiento, lo que ha creado «un mercado mucho más abierto», lo que, en su opinión, ayudará a Oppo a crecer más rápidamente en Europa.
Una ventaja que, sin embargo, podría verse alterada por la guerra comercial entre China y EEUU, que en la actualidad afecta principalmente a Huawei.
A este respecto, la directiva de Oppo ha recalcado su preocupación y ha explicado que, en su opinión, el bloqueo actual «no es solo por los ‘smartphones’, sino que la razón principal de la prohibición es la fuerza neta que tiene China en tecnología».
Por ello, la compañía está centrada en hacer que «los consumidores elijan su experiencia» con independencia de la guerra comercial.