(Intra News) | Buscar una mejora estética se ha ido acrecentando conforme avanzan los años, y tal es el caso de los tatuajes que ahora son cada vez más comunes. Y todo parece indicar que la tecnología busca vincularse con la piel por medio de los Smart Tattoos, conocidos también como “sistemas electrónicos epidérmicos”, que tienen la finalidad de adherirse a la piel.
En este contexto, los tatuajes inteligentes no son otra cosa que circuitos personalizados, conductores y microprocesadores que buscan ser una interfaz para potenciar los diversos dispositivos inteligentes con los que se cuentan. Sin duda que esto sugiere un amplio debate con base en las diversas perspectivas de las personas, pues para una gran cantidad puede ser una oportunidad de innovación, mientras que otras podrían verlo como una forma de invasión.
Lo cierto es que los conceptos básicos de un Smart Tattoo suponen una conexión por medio de un circuito electrónico en la piel, tal vez en forma de pegatina o alguna con la premisa de frotarlo y, una vez “instalado” funciona como un sensor. Así, este enviaría señales para comunicarse con un dispositivo inteligente, por ejemplo, el teléfono celular o un smart watch para estar monitoreado o monitoreada.
En este sentido, el control de esto podría verse de manera similar a los relojes de pulsera que miden signos vitales o algunas reacciones a estímulos externos. Por ahora, los tatuajes inteligentes serían temporales, pero a diferencia de una prótesis o la propia ropa, tendrían un mayor tiempo de vida. Y la ventaja es que serían muchísimo más baratos que otros equipos o herramientas inteligentes.
Finalmente, es importante señalar que las empresas detrás de esta iniciativa son Google y Microsoft, dos gigantes de la tecnología. En el caso de la primera, ha desarrollado SkinMark, el proyecto que pretende hacer del cuerpo una superficie touch. Mientras que la segunda ha desarrollado el tatuaje inteligente DuoSkin, que es un panel táctil adhesivo que puede reubicarse si así se desea.